Marie Curie recibió 2 premios Nobel y la numerología detrás del personaje es fascinante. Maria Salomea Skłodowska, de casada, recibió el apellido de su esposo, Pierre Curie, y así la conocemos.

Una fórmula mágica

La organización y la capacidad de trabajo hasta el límite de Marie, unida a la inspiración y la reflexión de Pierre, dio frutos en algunos de los descubrimientos que han cambiado la historia.

Gracias a la insistencia de Pierre (quien se negó a recibir el premio si no se lo otorgaban también a Marie) ella pudo recibir el NOBEL de Física en 1903 (compartido con su marido y con Henri Becquerel)

Más tarde y ya en solitario (Pierre ya había fallecido en un accidente) Marie recibió su segundo premio NOBEL de Química, en 1911, por el descubrimiento de dos nuevos y desconocidos elementos: RADIO y POLONIO.

Con una trayectoria impresionante, y una capacidad de trabajo fuera de lo común, tuvo que sortear muchas dificultades, económicas y discriminatorias, por ser mujer, extranjera, comunista, y además la pérdida de su «gemelo» y compañero, Pierre Curie.

Efectivamente, en su numerología observamos que Maríe venía con un gemelo que se perdió durante su embarazo.

Pero para un 40/4 no hay barreras, no hay cansancio, y además va a estar siempre dispuesta a traspasar los límites, si fuera necesario. Es el constructor de lo imposible, y las bases una nueva ciencia tendrían que ser creadas por una persona así.

Y la leyenda continúa…

Porque ahí no queda ahí la cosa… su hija Irene también recibió el premio NOBEL de Química en 1935, junto con su esposo y antiguo ayudante de Marie, Frederic Joliot.

En cambio, ninguna de las dos, ni Marie ni Irene,  fueron admitidas en la Academia de Ciencias de Francia.

La nieta de María, Helene Joliot Curie, actualmente es profesora del Instituto de Física Nuclear en la Universidad de París, y unió su destino a Michel Langevin, nieto de Pierre Langevin, con quien Marie tuvo una relación ya siendo viuda de Pierre, a pesar de que Michel estaba casado… todo un escándalo para la época.

¿a que no lo sabías?